viernes, 11 de febrero de 2011

Compromiso de gestión

Prometo hacer un ranking con las 5 peores rotiserías de Montevideo.

domingo, 8 de agosto de 2010

De mariachi al living

Anoche fui a al living. Una mina de buen lomo, con una musculosa apretada y unos ajustadísimos pantalones de cuero, que seguro se pagaron en más de cinco cuotas y no le van a quedar bien en dos años, dio un show sobre la baranda del segundo piso que pareció ser declarado de interés ministerial (por Lescano), haciendo una coreografía cabaretera que deleitó a los y las presentes, sin importar el sexo y orientación sexual de quienes la observaban.

La tipa parecía ida. Ni en esta ni en ninguna época, no es para cualquiera ser voluntariamente el centro de atención de unas más de cien personas (entre adentro y afuera), y menos en un boliche de ya cierto arraigo nocturno en Montevideo, y con perspectivas de ir en aún mayor ascenso. Cualquiera podría decir que aquel baile fue una expresión máxima de libertad y una satisfacción de pulsiones personales. A mí me parece todo lo contrario.

El living: no es el boliche típico montevideano, ni por su utilización, ni por la música, ni por las personas. Los lugares de sociabilidad, por frío que haga, acapara a toda la esquina, incluso hasta la vereda den frente, la muchedumbre de hace lugar, que es copado por un compendio de personas que en un 40% parecen jugar, directa o indirectamente, con un mensaje de sexualidad dudosa (a veces la tendencia es clara) y vestimentas juveniles que van desde lo indie hasta lo punk, pasando hasta por floggers y emos, y que hacen lo posible para separarse de cualquier significante conservador. Para mi suerte, no tengo por qué fumarme al Dady Yankee o a calle 13, salvo en momentos que aluden específicamente a música en una subyacente clara muestra de burla a la música de la industria popular cultural y tropical latinoamericana que yo comparto plenamente.

Con todo este escenario montado, que logra incluir a lo gay, a modas minoritarias que se acercan mucho más a lo europeo o norteamericano y a espectros musicales separados de la tendencia mayoritaria de un continente conservador y retrógrada, no es de extrañarse que este lugar tenga un rol preponderante como alternativo y freak , dentro de la vida nocturna uruguaya. Esto, sumado a su buena ubicación, y a una incipiente moda de lo cool en Uruguay, aparente espejo de la economía uruguaya, lo catapulta a un nuevo nivel: No es de extrañarse que empiece a cobrar entrada.

Pero todo lo que se instituye por oposición a algo está limitado a las condicionantes de su inverso. Aquella mina no bailó en su máxima expresión de libertad, deseo y desenfreno natural, sino que era el producto perfecto y exacto de las limitancias de una sociedad con predominio abusivo no sólo de la imagen sino de la sexualidad (que pasó de ser el tabú al valor preponderante), y de la sensualidad y sumisión del sexo femenino al placer del hombre y el erotismo (y en un boliche gay friendly, paradójico!). Era la misma turra que baila de noche en showmatch, disfrazada de "el living" para la ocasión.

Aún cuando la juventud tiene la obligación de ser el ala renovadora de una sociedad envejecida, y más en el caso de Uruguay, la imposibilidad de destruir los valores hegemónicos de lo construido es elocuente. Las excentricidades que vi ayer, encabezadas por este baile y seguidas por un vestuario mayoritario que hace pensar en una moda paralela, no son residuos sociales, no son parte de una contra hegemonía, no tienen nada que disputar. No hay un debate profundo. Sólo variedad de gustos. No aporta nada.


 


 

lunes, 5 de julio de 2010

Voyeurismo de vivienda

La manera más interesante de entender la esencia de una persona es estudiar su forma de perder el tiempo. Algunos se ponen a ver la tele, otros leen, muchos se tocan, unos pocos escriben, y los amantes de la gula atacan la heladera. A mí me gusta caminar. No es que no haga ninguna de las otras opciones que enumeré, pero no hay nada que disfrute más que andar por la calle escuchando algún disco de música –que nunca es el mismo, tengo obsesivos sistemas de no elección para evitar una repetición- mientras miro a la gente, descontextualizada de sus sonidos, de sus voces, sus ambientes. Sólo así adquiero una objetividad inútil para ver las cosas, tan solo atenuada por el disco de turno.

Más divertido aún que ver a la gente, es ver el interior de las viviendas. Uno no puede ser la cara que ve, porque no se ve su propia cara. Pero sí puede imaginarse cómo sería su vida si viviera en la casa cuyo cuarto es vulnerable al ojo del transeúnte. Una pensión llena de viejos y un monumental cuadro de una plaza española bombardeada por un diluvio, un apartamento de decorado minimalista en los primeros pisos de un edificio de Pocitos, una vieja casa del Cordón, con claraboya, pocas ventanas y muebles reciclados. A todas las mirás por no ser tu casa, a todas las comparás con tu casa, el lugar donde comes, dormís, tenés sexo y también podés irte por el caño tranquilo.

Hay otro estado de las cosas que es aún más difícil de llegar, que es al de las normas implícitas que rigen en cada una de las casas. Esto ya no pasa por lo visual ni por nada sensorial. Para conocerlas hay que convivir con esas paredes. Esas normas son las que moldean a la casa y también tienen mucho que ver con su apariencia y aura. La cosa no es sólo un ínfimo detalle decorativo, sino una institución invisible, pasmada en la disposición de las paredes, los muebles y los electrodomésticos.

Por ahí las casas y sus reglas hacen más a la vida de la persona que su propia cara, que no es otra cosa que el azar de la genética. Espero no ser el único en sufrir de este curioso voyeurismo, que es base de muchos otros más que padezco. Pero lo cierto es que esto hace que yo no pueda conocer bien a una persona, hasta pronto no vea como es su casa.

lunes, 16 de noviembre de 2009

Los 10 personajes más chantas de la televisión uruguaya

Tal como prometí hace 11 meses, presentó aquí mi ranking de los 10 personajes de la televisión (no políticos) más chantas del Uruguay, en colaboración con mi ayudante, el señor Estalinista Autoritario Decimonónico.

No me quedó otra que excluir a Nery Pinatto, quien a mi entender estaba demasiado involucrado con el mundo de la política y no podía ingresar en este ranking. Por mismo argumento también dejé afuera a Abel Duarte.



10. Robert Rocha (Juego de la Cédula – Director de programación de Radio Montecarlo)




Puede ser que se trate de un profesional intachable, de un tipo que se rompe el lomo laburando 12 horas por día, o de uno de los tantos uruguayos sacrificados que desayuna mate cocido. Pero lo cierto es que la sonrisa que este señor pone en el Juego de la Cédula habla por sí sola: es la de un chanta con todas las letras. No hay vuelta que buscarle. Ni que hablar si le agregamos su voz, sus gestos y la exagerada forma en que simula felicidad cada vez que recibe a alguna anciana que logra alzarse con el premio consuelo que ofrece el juego por acercarse al número ganador.




9. Fernando Vilar (conductor de Telenoche 4)

El conductor principal del noticiero más amarillista del país. Un tipo que no tuvo ningún pudor al decir que conduce un programa de entretenimientos en el 4º Encuentro de Jóvenes Comunicadores (realizado en Trinidad este año) no puede escapar de ninguna manera a este ranking. A este señor no le pidan que opine o haga juicios de las noticias que da, porque probablemente ni las entienda. Recuerdo una vez que asistí a una transmisión en directo del informativo y Vilar le preguntó a la producción qué quería decir “abuso sexual”. De aquella interrogante deduzco (y quiero creer) que es un periodista que está esencialmente para la “facha”. Y si no es así…



8. Homero Rodríguez Tabeira (el 5 de oro - avisos de Roemmers)



Detrás de su sonrisa apenas sostenida por un gasto desconsiderado en Ultra Corega existe un personaje que de seguro debe haber pisado varias cabezas para encarrilarse en el mundo de la fama. De otra forma no se explica cómo hizo para haber logrado mantenerse tantos años con la conducción del codiciado 5 de Oro. Por lo demás, es muy gracioso escuchar y ver a este señor hablar, no sólo por su voz de papa, sino por esa constante sensación de que el adherente de la prótesis dental le va a fallar en cualquier momento.


7. Carlos Tate (Entrenate con Tate)


Solo un verdadero zarrapastroso como Carlos Tate se anima a dar clases de aerobics por la mañana en Vtv, junto a dos changos de Mariachi, intentando contrarrestar la creciente audiencia que por 2005 tenía “Catherine 100%”. Incluso para un canal ícono de la patética cultura deportiva uruguaya como VTV, el nombre ''entrenate con Tate'' resulta una evidente estafa, con ejercicios que difícilmente mejoren la capacidad aeróbica de la más sedentaria de las desprevenidas ama de casa que por accidente haya sintonizado ese programa. Posiblemente el mayor aumento de la frecuencia cardíaca que se de al ver ''(¿des?)entrenate con Tate'' sea cuando uno se pregunte cómo alguien que debe estar pisando el 25% (con mucha suerte) de grasa corporal pueda parase frente a cámaras con una musculosa apretada en procura de mejorar la forma física de alguien. Me saco el sombrero ante este verdadero pseudo guru mediático del fitness (a la misma altura del presentador que promueve el reduce fat fast), que probablemente sabe mejor cómo estafar a alguien haciendo de entrenador, que armar una rutina que te haga entrar en lipólisis.


6. Sergio Gorzy (Cámara Celeste – La hora de los deportes – Buscadores, y un sin fin de pedorradas más)



Qué decir de Gorzy, el cuarto maratonista que nunca baja de peso, el conductor de la sonrisa colgate clavada, el soldado de Casal, el gordito “carilindo” del verano, el relacionista público que se lleva bien con todo el mundo, el enemigo de Ríos, el de los videos noventosos de Uruguay campeón de América. Una persona chanta por esencia. Deslindado de cualquier miligramo de ética, el único fin de cada minuto de su vida es tratar de ser mediático, pero ni aunque haga sus mayores esfuerzos podrá serlo. En lugar de eso es como el payaso de la televisión uruguaya, pero sin pintura. Un gordito nuevo rico, poco transparente, acomodado y encima currero, todo lo que un uruguayo odia.



5. Julio Alonso (Los viajes del 12 – Parque Jurásico (!))




Este conductor, de la escuela más impresentable del canal 12 en los noventa, debe ser el único “periodista” que cubrió los últimos 15 carnavales de Río de Janeiro y no aprendió una sola palabra en portugués. Por lo demás, se podría decir que tuvo el curioso don de hacer destacar a Victoria Rodríguez en la conducción de un programa, porque cada vez que él estaba al micrófono en “Los viajes del 12”, el televidente terminaba por extrañar a Vicky, siempre y cuando no tuviera televisión por cable y no prefiriera mirar “Bien de Bien”.



4. Cacho de la Cruz (Parqué Jurásico – El show del mediodía – Cacho Bochinche)



Otro dinosaurio de la peor escuela de canal 12. Cacho tiene el mérito de haber conducido los programas más deprimentes de la televisión uruguaya. ¿Qué es peor que almorzar un domingo al compás de la musiquita del “qué será, será” del Show de Mediodía? (la mejor respuesta sería masturbarse mirando a Chichita) ¿Qué era más triste que prender la tele un sábado de mañana cuando éramos niños para ver si en una de esas encontrábamos dibujitos, y encontrarse con Cacho, Laura y Ultratón? Y hoy en día, ¿Qué es más lamentable que Parque Jurásico? ¿ ¿Es posible algo más aberrante que Cacho+Julito Alonso? No lo creo.


3. Humberto de Vargas (Desafío al Corazón, - infinitos programas para rellenar tiempos los sábados y domingos de verano en Canal 10)


Siempre se ríe. Siempre está contento. No hay forma de inyectarle un poco de tristeza y eso ya es muy trucho de su parte, porque ningún ser humano puede ser por naturaleza tan eufórico como él intenta mostrarse. Pero lo que es más indignante es que combine esa singular característica con programas caritativos como la Teletón o el viejo y fallido Desafío al Corazón. El tipo es demasiado falso para dirigir este tipo de programas. Y encima los que miramos el 10 tenemos que bancarnos su voz en cada publicidad oficial del canal.



2. Rodolfo Pereira (Punto Penal – Sin Límite – Deporte Total)

Más conocido como “el negro de Deporte Total”. Cliente vitalicio de Pizzería Venecia, Rodolfo Pereira es uno de los farsantes más grandes de la historia del triste y venido a menos mundillo de nuevos ricos del fútbol uruguayo. Este tipo, que no tiene problemas en hacer ver su mal gusto en todas las facetas de su vida, siempre está metido en algún lío o escándalo del cual trata de sacar su parte, sometiendo a la audiencia a una especie de espacio de réplica que el mismo hace en los programas donde participa. En esos minutos Pereira aprovecha para difamar a algún personaje conocido de la vida pública (que por lo general es Gabito), y además saca provecho de la situación e intenta engañar, inútilmente a los televidentes, intentando mostrarse como el principal representante de un periodismo honrado, honesto y detallista, que ni él, ni ninguna de las personas que alguna vez le dirigieron la palabra forman parte.


1. Julio Ríos (La hora de los deportes – Punto Penal)


Por si el plagado éter televisivo uruguayo no tenía suficiente drama, gritos y peleas con los programas de chimentos, las telenovelas centroamericanas de tercera y los reality shows, para todo lo demás está Julio Ríos. Este tipo es una verdadera personificación masculina de la attention whore. Si lo que de casualidad son llamados ''periodistas deportivos'' formaran un curso, Julio Ríos sería una vedette (con plumas y todo) que iría liderando a estos presentadores de programas que no son otra cosa que equivalentes funcionales de los programas de chimento, pero para hombres. Pero lejos de tener la habilidad mediática de Rial o Canosa para esta tclaseipo de programas para marginales culturales, Ríos se ha hecho famoso por intentar extrapolar el lenguaje de la biología al fútbol, utilizando palabras del estilo de “fagocitar”, que pueden ser encontradas en cualquier libro de biología de sexto de escuela. Y no se dejen engañar por este máximo generador de melodrama y vaudeville que, en dondequiera que aparezca, la experiencia más cercana a deporte que tiene son probablemente sus intentos de batir su marca personal de sesiones de cama solar en un día.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Cabo de Java, de Alistair MacLean

Hay veces que está bueno volver a libros más lineales, sin significaciones que superen el propio sentido primario de las palabras, ni prosas complejas, aderezadas o demasiado ilustrativas. Es lo que me pasó con esta novela, del desconocido escocés Alistair MacLean, de nula repercusión en Latinoamérica y probablemente en cualquier país de habla hispana.

Ubicada en plena guerra de Singapur, en el contexto de la Segunda Guerra Mundial, la historia relata como una troja de supervivientes de la región escapan de la ciudad de Kallang a mar abierto en busca del territorio aliado más cercano: Australia. En su viaje son acechados no sólo por un clima hostil, sino también por innumerables variedades de aviones, barcos y submarinos japoneses que destruyen su vehículo de turno no menos de tres veces, hasta hacerlos naufragar en una isla.

La historia que se cuenta carece de cualquier tipo de referencia sexual, e incluso de cualquier mención especial a la vida de los personajes, más allá de las necesarias para el curso del relato. Eso hace que estos sean algo difíciles de imaginar, porque poco sabemos de ellos. Ni siquiera los diálogos logran ser demasiado elocuentes, y además las descripciones del narrador distan mucho de ser elocuentes. Esto dificulta un tanto la imaginación del lector para recrear la historia.

Pero el principal problema de la novela está en el exceso de adjetivos y adverbios con que está escrita. Esto probablemente se deba a que la traducción de la edición que leí es bastante mala. De todas maneras, se trata de un obstáculo que no sólo entorpece la lectura, sino que le saca ritmo y velocidad.

La historia va cobrando diversión en la medida que su tiempo interior transcurre. Algunos personajes son descritos en primera instancia de manera sobredimensionada para el escaso protagonismo que luego adquirirán en la novela, como el cabo Fraser. Otros se presentan como demasiado perfectos en sus acciones en relación a los demás (hasta adquirir etapas de cuasi súper heroísmo), como Nicholson o McKinnon, aunque este tipo de veneración hacia algunos personajes forma parte del género al que pertenece la novela y hasta puede enriquecerla.

Por lo demás, la novela, liviana y sencilla, es una buena oportunidad para quien quiere adentrarse en una literatura básica y lúdica, desprovista de segundas significaciones. Y no por eso es un mal libro.

lunes, 2 de noviembre de 2009

La nueva(?) historia que “engrandece” al Uruguay



Una de las escondidas causas que me llevaron a renunciar de la sección de economía de Observa fue la tortura que me significaba tener que escuchar todas las mañanas esta publicidad por una radio am.

Al publicitario que la creó se ve que le dijeron que tenía que tratar de buscar asociar la marca con algo uruguayo, porque parece que estaba instalado en el imaginario colectivo de la gente que Shneck no era una industria nacional, y ahí fue que todo se derivó en esta verdadera vergüenza nacional, que merecería ser desterrada de todas las emisoras de radio y televisión locales, sólo por haber cometido el mayor abuso de lugares comunes en la historia de la publicidad uruguaya.

Como es de esperarse de cualquier aviso berreta de esta calaña, se apela a los típicos recursos desgastados y mentirosos de lo que significa ser uruguayo. El fútbol, la murga, el barrio, el mate, el bar, los viejos jugando al truco y todas esas porquerías que los nacidos después de 1980 queremos erradicar del imaginario colectivo nacional. Como si no bastara para hacernos entender este absurdo cliché, la publicidad termina ilustrando a una especie de Wason murguista, que aparece como el principal responsable de la parte vocal del aviso.

Este tipo de recursos que apelan a la identidad del Uruguay ya había sido utilizado innumerables veces por Canarias y El País, pero nunca antes se me había ocurrido que una empresa procesadora de fiambres podía también apelar al mismo mecanismo para vender algunas fetas más de jamón.

El aviso parece tratar de comunicar que las historias de las personas que viven en nuestro país son humildes, pero a la vez honradas y grandiosas. Visto desde los ojos de un extranjero, se puede concluir que los uruguayos no sólo tenemos un pésimo gusto musical, sino que nuestras vidas son un verdadero embole.

El hecho de que nuestro pueblo se engrandezca por unos viejos borrachos que matan sus días jugando al truco, por una selección de fútbol mediocre, unos verduleros que levantan fruta en el mercado modelo por 30 pesos la hora y un murguista con cara de violador, no parece motivo ninguno para sentirse orgulloso de pertenecer a ningún país.

Un análisis pormenorizado de la letra puede sernos útil:

Hay un país distinto a los demás (no jodas, pensé que eran todos iguales)

un pueblo con mar (muchos pueblos del país no tienen mar)

descubre un nuevo día (?, se ve que había que rellenar con algo)

Veo a la gente en las tribunas del estadio en esa esquina de mi barrio, en la rambla, en el campo y en su pago natal (y en el subte Magallanes también veo gente, por dios, ¿qué aporta esta frase?)

Van construyendo las leyendas del lugar (con este criterio, cuando tengo diarrea en el baño del Intramuros, también construyo la leyenda del lugar)

Son almas que forjadoras del país (¿quién te enseñó a redactar?)

cosechan hoy, una vez más (sí, como todos los días)

historias que son tan simples de contar (re simples, como la que desencadenó el golpe de Estado del 73 o la que hizo que algunos políticos crearan la ley de caducidad)

La identidad, que sus hijos van (¿los hijos de quién?, ¿qué identidad?)

Sembrando hoy, la nueva historia que engrandece nuestro Uruguay
(si eso es lo que engrandece a un país, todos los países se engrandecen, entonces la grandeza de Uruguay no tiene nada de especial)



Y lo peor de todo es que si uno ve los posts adjuntos al video que está en youtube se va a encontrar con varios pelotudos que dicen estar orgullosos de ser uruguayos al escuchar esta canción. Incluso uno se tomó la dedicación de HACER LA TABLATURA DE ACORDES DEL TEMA. La única persona con algo de espíritu crítico opina que “esto es más de lo mismo”, y dice que si a alguien le enorgullece este aviso es “un pelotudo”. Es lamentable que estos comentarios tan certeros hayan sido mal calificados por las demás personas.

Hay que darse cuenta de una vez por todas que la cultura nacional no es el mate, la murga, el partido de Uruguay, los viejos jugando al truco y los verduleros. Es muchísimo más que eso. Es Javier Abreu comiéndose una hamburguesa de su propia mierda en medio de una performance, es una pareja de lesbianas apretando en la barra de un boliche de electrónica, es un cuidacoches que hace malabares en la esquina de Canelones y Boulevard Artigas, es un par de quinceañeros que se fuman un porrito en la tribuna Ámsterdam del Estadio. Es esta misma columna.

domingo, 1 de noviembre de 2009

Electionary dispatch

Almost without natural disasters, no armed conflicts, Uruguay doesn't make it to the headlines in most foreigner newspapers and whatsoever. The elections are not the exception as nothing implying body counts, shootings or even an hybrid of urban guerrillas (somehow I'm going to mention this in a minute..)/ durg gangs going Mogadishu and shooting down a police helicoper. Hell no. If you are a journalist somewhere in the world, looking some food for sensationalism, shocking news, the elections here ain't gonna do it for you.

Still, there are some sui generis features being that Uruguay is not a purely post modern society and isn't all that politically apathic as you may find in other countries, where elections are just another transaction. Who are the big contenders here? Well, I'll introduce them starting by the one who's more likely to actually be elected. Let's start :

Meet José ''Pepe'' Mujica, the candidate for the left-wing coalition Frente Amplio. One cannot speak of Mujica without speaking of the Tupamaros, mind you, a boutique urban guerrilla formed by left wing hippies from the late 60s til the
early 70s. Why were they a boutique urban guerrilla? An urban guerrilla is a broad term and you have something like the
Iraqi Resistance in one end of the spectrum, and groups like Ireland's IRA, Spain's ETA which would fit more in the
''boutique'' category on the other side, meaning that their attacks are selective and killing civilians is not their objective. Unlike the
Iraqi Resistance (some of its factions actually), these groups don't want to kill civilians indiscriminately and deliberately
as part of their military target. By international standards, having only 2 civilian deaths in your record, as horrible as a
death of a person may be, is laughable. So everytime you hear about Mujica and the Tupamaros, take it with a pinchof salt. A Uruguayan guerrilla is not what you would call a guerrilla somewhere else. Even if its opponents use his
past against him and some scared aristocrat teabagging old lady may call him an evil ''communist'' killer, they are
overrating the Tupamaros.
What else do you need to know about Mujica? He's not your typical politician, lives in the outskirts of Montevideo, has a farm in which he works. Because of his informality and spontaneity, he earned a lot of sympathy from lower classes but also the rejection from higher classes. He's also identified as part of a ''radical'' left faction in the coalition unlike current president who may be seen as center-left and moderate. Hippie left wing militant oldtimers are all for this guy and have their back to the 60s day, the May 68 remastered in high definition, dvd quality. However harmless they seem, they can blush jihadist militants with their fanaticism. Middle class university ''socially conscious'' types are also with this guy.



Now, it's Luis Alberto ''Cuqui'' Lacalle's turn. The man is a political animal, his grand father was a politician, his father was a politician and guess what his son is a politician and his wife is a politician. Hell, I woudn't be amazed that even his pets are politicians.
That's probably all I can say to his credit. He's been around for a long time and was president during de 1990-95 period which is why he used ''with the blancos (the blanco party) we lived better''. That is probably true, for
all his corrupt felon friends who were in his government. Even his wife was involved in a corruption scandal, includingthe privatization of two banks. One of them, sold to the Rohm brothers who would later (in 2002) leave the bank empty and vanish. During these privatizations, many of his closest positions (including secretaries and ministers) received ''comissions''. One of his ministries was also involved with money laundring and off shore banking which created a fiscal paradise in Uruguay.
This is the candidate both for the aristocrat scared teabagging old ladies and 4x4 driving hillbilly wannabee tycoons who own lots of square kilometers of land and earn lots of money for extensive agriculture. Oh yeah, if something goes wrong with their business, they WILL complain to the government and demand subsidies of some kind.









Let's now move on..if multimillon corruption scandals are not your thing Pedro ''shh!...don't say my last name too loud'' Bordaberry is your guy (not that the Colorado party is free of these but the candidate, is, I guess). One thing is to spend 15 years in jail like Mujica in very bad conditions or have alcohol problems like Lacalle but having a father who cooperated with a military coup in 1973 and being the president during some period of the dictatorship,
that's another thing. Why he did it? I heard it from himself in an interview, to save the country from a freemason/ communist conspiracy. I can buy the communist thing as it was the Cold War (or not that cold..) but freemasons??
That's as random as.. :

a) Aliens (they are a top conspiracy creation driver, so let's show some respect for the aliens)
b) Yoga practitioners (I'm sure some of their positions have hidden subversive motives)
c) An army of undead garden dwarves gathering to take over.

Much to his credit, he appears to be mentally healthy in spite of a father with bizarre conspiracy theories and his discourse is reasonably articulate. He's your typical conservative candidate, he has lots of brothers who look like replicas (maybe he's some type of manchurian candidate), makes me think there was a lot of interbreeding there, typical of ultra conservative aristocrat families who look back at the thirteenth century with nostalgia. I can see Maria de la Concepción Salaberry Perez Suarez de Perez voting little Pedro along with her 9 siblings and cousin/husband after some meeting in a church belonging to the ultra conservative Opus Dei. ''Gee, what's this voting thing? The serfs vote and all!! I'll have to transfer a couple million dollars to my bank accounts in the Bahamas, just in case, how scandalous. We have it soo hard ''.
I suspect that the guy himself must be involved with some ultra catholic order with this kilometer long name people, this is probably his religious freak side and I suspect that should he win, we would be back to the inquisition times. Good party for scared aristocrat teabagging old ladies (the colorado subtype) who are afraid of the evil communist, tupamaro, possibly baby killer guy. He also tried to play it cool and even had a reggaeton song ''Bordaberry is the boss'' as part of his campaign..anyone involved in that idea deserves to be shot (Lacalle also had a cumbia...that's as distateful, Mujica had a murga not that bad, still...it's a murga, 'nuff said)



Then there are the referendums, I may have a second chapter for that. Overall, all the campaigns regardless of the parties are pathetic, the ''analysts'' who try making complex arithmetics out of polls look retarded taking obvious conclusions from fancy graphics. The TV is continuously repeating speculations from the ''analysts''. I'm sick of the facade, the circus, the carnival, the flags...none of this would happen if I was the dictator.

About the electionary dispatch : Taking out the sui generis elements of the Uruguayan election and from a cuasi nihilist, somehow disenchanted view. I write the dispach to canalize the intellectual, ethical, moral, cultural repulsion generated by the elections.

Pasaron por aquí

Seguidores